A veces pienso que el destino ya está escrito, las personas nos traspasan su energía y junto sus miedos y temores, No hay que dejar que lo ajeno, afecte tú autoestima. No tenemos que cargar con los problemas de los demás, porque cada uno tiene su propia lucha, ser fuerte y seguro creyendo en todo lo que eres capaz, pero sin mentirte a ti mismo. ¿Qué sucede cuando vivís rodeado de un entorno retrogrado?, al punto de quedar influenciado por sus costumbres. Para avanzar no hay que culpar a los demás de lo que te pasa, pero hay veces en que nos cansamos de tanta mierda, tocamos fondo y cambiamos nuestra forma de ser. ¿Qué pasa cuando solo necesitamos ese abrazo para sacar nuestra transparencia?, pero no tenemos ese hombro salvador porque no queda nadie más contigo. Cuando dejas de creer en el otro y cuesta que te creas a ti mismo. “Solo nosotros sabemos nuestro propio valor”. Renunciar no es una alternativa, posponer tampoco. ¿Y entonces?. Todos los problemas son mome
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